Paula Cofré se prepara para ser la primera latinoamericana en subir el Lhotse sin apoyo de oxígeno
Se trata de la cuarta montaña más alta de la Tierra, con 8.516m s.n.m. y que se encuentra ubicada en el Himalaya. Su próximo desafío sería el Everest.
Fue a finales del 2016 que Paula Cofré comenzó a subir cerros haciendo de este deporte una distracción de fin de semana, sin embargo con el tiempo se enamoró de la disciplina y dos años después se lanzó a experimentar la media y alta montaña. Superados los cinco mil metros sobre el nivel del mar (s.n.m.), sus desafíos aumentaron y las metas dejaron de ser locales para abrirse al mundo.
Paula se fijó en el Aconcagua –Las Heras, Mendoza- y en el Mont Blanc –Los Alpes, Europa- por ser montañas icónicas en el mundo, y comenzó su trabajo de preparación para subirlas. Con un entrenamiento diario, de dos veces por jornada, alterna entre el trote en la calle, trail running, gimnasio y ciclismo, acompañada de su reloj Garmin Fénix y su banda cardiaca; y los sábado y domingo va a la alta montaña, en donde además se apoya en su Inreach, “que es clave para sentirme segura y me permite mandar mensajes desde cualquier parte del mundo, incluso no teniendo señal” , explica la deportista.
De América a Europa
El Aconcagua cuenta con 6.962m s.n.m. y Paula lo subió en cinco días, “cuando lo normal es hacerlo en 14 a 16 días. Y es que a mi me gusta el montañismo rápido, sin aclimatación ni días de descanso. Me siento muy bien en altura y me gusta aprovechar eso”, señala.
En cuanto al Mont Blanc (4.810m s.n.m.), la cumbre más alta de Los Alpes, la montañista viajó el 2023 a Europa con la idea de subirla en formato solitario. “Tiene una ruta preciosa, hay grietas en el camino por lo que lo ideal es ir con una cordada (grupo de personas que hacen montaña y están unidas por una cuerda), pero estudié mucho la ruta antes de ir, así que me encontraba preparada para subir sin compañía. En esa ruta conocí a muchas personas, porque es una cumbre muy deseada a nivel mundial”, añade.
Pero el realizar montañismo en solitario no es lo único que caracteriza a Paula Cofré, pues también el ascenso lo realiza sin apoyo de oxígeno. La montañista explica que sobre los 8.000m s.n.m. el cuerpo satura apenas entre un 30 y un 20% de O2, por lo cual son muy pocos los deportistas que enfrentan las alturas sin soporte. “Allá arriba nadie te ayuda, tienes que ser autosuficiente, pues si algo te pasa nadie te va a bajar. Es un tema muy delicado y por eso hay que estar muy seguro a la hora subir sin oxígeno suplementario”, agrega siendo consciente de los riesgos que corre.
Marcando récord
Para enfrentar su próximo desafío, además de su entrenamiento de rutina, ha sumado subir el cerro El Plomo, con 5.424m s.n.m. y el volcán San José, con 5.856m s.n.m., por el día; esto para convertirse en la primera latinoamericana -y chilena- en lograr el ascenso al Lhotse, la cuarta montaña más alta de la Tierra con 8.516m s.n.m, ubicada en la cordillera del Himalaya, Asía.
El reto lo realizará en mayo próximo y lo hará sin oxígeno, por lo cual la preparación ha sido ardua. Y, tras cumplir este desafío, Paula Cofré tiene uno mayor en mente, y es ascender el Everest 8.848,86m s.n.m (Himalaya, frontera entre China y Nepal), sin soporte de O2 y con la meta de romper un nuevo récord como mujer y deportista.